Especies comunes : Globularia incanescens ; Globularia meridionalis ; Globularia punctata ; trichosantha ;Globularia vulgaris .
Origen:
Género integrado por unas 28 especies de arbustos caducifolios o perennes y vivaces procedentes de las Islas Cabo Verde y la región que se extiende desde el sur de Europa hasta Asia .
Descripción:
Plantas de biotipo empenachado, a veces con crecimiento tapizante
Hojas: de forma entre ovalada y cuneiforme.
Flores: son muy pequeñas, de forma tubular, con cinco lóbulos y aparecen reunidas en cabezuelas compactas integradas por un gran número de ellas. Su color varía entre los distintos matices del azul.
Cuidados básicos:
Son plantas de flor que crecen bien en exposiciones soleadas y en regiones con temperaturas bastante cálidas, comprendidas entre 15° y 25° C. Durante el verano los riegos deben ser abundantes, mientras que en el invierno conviene reducir un poco su frecuencia.
Suelo y trasplante:
No son muy exigentes en cuanto al sustrato, aunque se desarrollan mucho mejor en una buena tierra de jardín con un adecuado drenaje. El trasplante a su emplazamiento definitivo se puede realizar en otoño, o bien durante la primavera.
Abonado:
El abonado orgánico se le proporcionará a la planta en el momento de preparar el terreno para su instalación y para ello se empleará estiércol bien fermentado. Durante la época de floración, que se extiende desde mediados de la primavera hasta finales del verano según las especies, conviene suministrarles un abono líquido disuelto en el agua de riego y aplicado con una frecuencia quincenal.
Ubicación:
Las especies arbustivas de Globularia se suelen emplear para la formación de macizos de flor, mientras que las de más pequeño porte se adaptan bien para la confección de pequeñas manchas tapizantes de color en el césped. También se pueden emplear estas últimas en rocallas.
Plagas \ enfermedades:
Normalmente no suelen resultar afectadas por las plagas y enfermedades más comunes en los jardines.
Consejos útiles:
La multiplicación se puede llevar a cabo por semillas plantadas durante la primavera o por esquejes de tallos no floríferos obtenidos a finales del verano. Los aficionados que posean una mayor práctica en estas tareas pueden multiplicar también las Globularias por división de la planta madre durante la primavera, pero poniendo mucho cuidado en esta operación, pues son muy delicadas.
